Bellocq: Alojamiento en una abadía de 1914, comidas criollas y aroma a manzanillas
La localidad de menos de mil habitantes, entramada entre diagonales y monolitos fue fundada en 1912 por Maria Larramendy sobre las tierras de la estancia Santa María con el nombre Bellocq.
Ubicada en Carlos Casares, conserva la capilla Inmaculada Concepción, de estilo contextualista latinoamericano construida en 1914 por monjes benedictinos. Con una residencia monacal y un colegio al que llegaron seis monjes con el fin de evangelizar a la población posee una colección de dieciséis vitraux, del artista francés Henri Gesta de Tolousse.
¿DORMIRÍAS EN UNA ABADÍA DE PRINCIPIOS DEL SIGLO XX?
Al lado de la capilla que fue restaurada y conserva mobiliarios centenarios, en la residencia monacal funciona el Hospedaje San Benito: una forma diferente de alojamiento en contacto con el silencio, la espiritualidad y el entorno campestre.
"El nombre del complejo homenajea a uno de los monjes benedictino de la época y nuestro objetivo es brindar la mejor hospitalidad a quienes están cansados del ruido y buscan silencio para leer y conectar con el campo", explicó Mariela Rodriguez, encargada del hospedaje.
El lugar ofrece una sala de estar compartida con hogar de la época y está dividido en dos. Una parte incluye habitación pequeña con dos camas individuales, baño y cocina, mientras que la otra es más grande y está equipada con cocina, baño y dos habitaciones para albergar ocho personas.
"Por esas cosas de la vida el monseñor Martin Elizalde confió en nosotros para la reconstrucción y adaptación de este lugar que cuenta con unos cimientos sumamente importantes, por el momento no contamos con servicio de desayuno pero facilitamos todo lo necesario para preparar unos buenos mates y disfrutar de la galería", detalló.
En este momento del año, el aroma a manzanilla recorre todas las calles de pago. En el lugar se cosechan y se procesan estas plantas con florcitas de pétalos blancos y centro amarillo que se parecen a margaritas en miniatura. Son medicinales y se utilizan con fines terapéuticos.
"En Bellocq, somos unos de los mayores productores de manzanilla en la Provincia. De eso, una parte se exporta y otra se utiliza en el mercado interno para la elaboración de infusiones", afirmó Federico Pagella, referente histórico del pueblo.
Sin dudas, un sitio perfecto para desconectar del agobio rutinario, leer libros, matear, compartir relatos y escuchar el canto de los pájaros entre la brisa del campo bonaerense.
El pueblo también invita a visitar el Museo Sergio P. Ábalos -@museoabalos-, un edificio de 1940 con exposición de objetos y fotografías sobre los primeros pobladores y los almacenes de ramos generales "Gigli" y "Casa Elhelou" que datan de 1917.
Entre arboledas añosas se pueden degustar las exquisitas elaboraciones caseras como su lemon pie o tarta de frutilla que son los productos más elegidos por sus clientes, de la panadería Madalmar, que desde hace 23 años mantiene sus puertas abiertas y en la actualidad, la atiende la hija de sus primeros dueños o aprovechar la cantina del club social bellocq -@clubellocq- con un amplio horario de atención y carta clásica de pastas, pizzas y hamburguesas.
"Nos gusta mucho elaborar de todo un poco hoy nos encargamos más de las masas dulces, en un principio las milhojas que realizaba mi mama era lo más vendido, pero como ya es una persona mayor no estamos elaborando"contó Ana Alonso quien está a cargo del emprendimiento.
Si sos de quienes llevan su bici a todos lados, el recorrido hasta el casco de la Colonia Santa María -también conocida como Chacra Experimental- invita a la aventura entre los paisajes rurales y termina en el mástil de la fundación del pago.
¿Cómo se llega a Bellocq?
Google Maps: https://maps.app.goo.gl/vcUifUcDzBoKUxWF6
Desde la Ruta Nacional N° 226 hasta el kilómetro 453 donde se encuentra la Estación Girondo y luego una vez allí nos encontraremos con un camino de 11 kilómetros más por la misma ruta.
También, se puede acceder desde la Ruta Nacional N° 5 en el kilómetro 309 desde allí tendrán que recorrer 45 kilómetros pasando por las localidades de Cadret y Centenario.
Allí te espera un viaje bueno, bonito y bonaerense, con hospedaje original y manjares inolvidables en la localidad de Bellocq, Carlos Casares.